9 de junio de 2009

perfecta

Todo iba bien hasta que tomó el arma.

Pero cómo no iba a hacerlo? Una creación humana prácticamente indestructible que se amolda a la mano, fácil de camuflar, fácil de utilizar, con capacidad para 6 balas, relativamente liviana, hermosa y hecha para herir. Perfecta.

Minutos antes estaba todo muy tranquilo, una conversación, una comida, una sonrisa, una caricia. De pronto pasó él frente a ellos.

-ese no es tu ex novio?
-si, es él.
-y no que se había ido a vivir a Europa?
-eso creía yo...

Algunos podrían pensar que es "la gota que rebosó la copa". Otros, que el tipo es un paranoico. Los que estaban en el restaurante cerca de la pareja juraron que el tipo sufría de mal humor y que constantemente maltrataba a su esposa. Sus hijos, sentados cerca a ellos, no sacaron ninguna conclusión porque no entendían nada.

-eso creías? maldita MENTIROSAA!!

Los que no sabían quién había gritado, lo identificaron rápidamente al buscar entre los presentes y encontrar una cara roja, desencajada y con ojos saltones y vidriosos. Los niños dejaron de comer.

-crees que soy un idiota, verdad?
-Samuel, la gente!! los niños!!
-me importa UN CULO TODOOO!!!

Estará borracho, pensaron algunos. Esa señora es una puta, pensaron algunas. La madre de Samuel pensaba en ese momento desde su casa que el galán de la novela se parecía un poco a su hijo, mientras el gerente del restaurante le decía a un mesero que se acercara a la mesa e intentara calmar sutilmente al caballero.

-eso Samuel, dile a tus hijos en la cara lo que realmente piensas de ellos.
PAFFF (cachetada de revés con nudillos en un pómulo lleno de base y rubor artificial)

La mujer se agarró la cara. Los niños abrieron los ojos como si no creyeran lo que estaba pasando. El gerente del restaurante se aproximó a la mesa igual que uno de los clientes que había estado observando todo.

-si no desean nada más, les pido el favor de que se retiren. - dijo el gerente mientras el hombre observador con un par de copas pensaba: -maldito!! he visto a muchos como él, castigan a sus mujeres como si fueran basura, como si no fueran nada. No valen un hijueputa peso!! cómo se atreve a pegarle!! cómo se atrevieron a pegarle a mi Julia!! mi Juliaa!!!

-Nos vamos ya!! -dijo Samuel.
-Para poder seguirla golpeando?? -dijo el hombre observador con copas y lleno de rabia. Algunas personas en el restaurante apoyaron lo dicho con sus valientes voces.
-Usted no se meta. No entiende.
-Por qué? le da miedo pelear con un hombre? -dijo el hombre observador valiente, con copas y lleno de ironía mientras se unían cada vez más voces valientes del restaurante en su apoyo. La mujer continuaba cabeza a bajo en la mesa.
-Vámonos ya!!
-Le da miedito, gran hijueputa?? - acto seguido, el hombre observador valiente, con copas y lleno de ira, empujó a Samuel. La ira de Samuel era más grande que todo en ese momento. Se lanzó sobre el otro y ambos cayeron al suelo revolcándose un poco mientras sonaban sillas y loza cayendo. Los meseros intentaron separar a los 2 hombres, pero al hacerlo, Samuel se dio cuenta de que su agresor tenía un arma camuflada cerca de las costillas.

Pero cómo no iba a hacerlo? Una creación humana prácticamente indestructible que se amolda a la mano, fácil de camuflar, fácil de utilizar, con capacidad para 6 balas, relativamente liviana, hermosa y hecha para herir.
Era perfecta.